Una época en la que además de tener un buen color y estar en forma, aprendi tantas cosas que ahora utilizo en mis espectáculos. Trabajar con compañeros ingleses, tener la posibilidad de probar diferentes modos de hacer reír a personas de diversas procedencias y conocer a tantas a personas que, en aquel tiempo, giraban en torno a nosotros, el equipo de animación del hotel.
La posibilidad de viajar y conocer nuevas culturas y pasado el tiempo reencontrarnos y charlar de aquellos momentos vividos,
Tantas horas bajo el sol, tantos largos en la piscina y tanta gente riendo y disfrutando de su tiempo de vacaciones.
Mañana iré a pasar el día a Padova, y volveré a estar con ellos y con Giulio e Paolo, aquellos bebes que tenía en brazos no hace tanto y que hoy, son casi tan altos como yo.
Lo mejor de los recuerdos, haberlos vivido.
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