Recuerdo tiempos en los que inventaba realidades paralelas, fantasias de una vida real dentro de una imaginación desarrollada para huir a cada paso en aquella vida mas morada que gris en la que los golpes llovían sin mas razón que, la propia lluvia en si.
Recuerdo tiempos en los que pensar no era nada sano, porque pensar mata, no seguir las vias del tranvia de la masa puede llevarte un trágico final, también recuerdo Amanda, la calle mojada, aunque esto es mas sencillo a dia de hoy pues, las autoridades competentes se empeñan en regar constantemente las calles a cambio de un trofeo con forma de escoba el cual lucir en sus vestíbulos municipales.
Pero llegó un momento en que la huida murió en un carrefour, bajo una cruz de piedra se despojó de aquel vestido de irrealidad y comenzó a ser, recuerdo que todo se lleno de luz, una luz que a los ojos de los mortales amoldados a los designios de los poderes fácticos, era y es cegadora, que asusta y ahuyenta, pero que carajo, cuando la vida se llena de verdad, cuando se pierde el miedo a amar, en toda su extensión, solo entonces se comprende que existe la libertad, o al menos algo que se asemeja mucho a lo que podemos tomar como tal.
Pensar sigue matando, pero no mas que nacer...
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
La memoria de los pies. Diario de un anormal. Presentación de la 6ª Edición
Hace 10 años y 6 ediciones de una idea Que cambió todo. Hace 10 años que decidí ser anormal. Así se lo hicimos saber al mundo con la a...

-
Para que surjan ideas y tomen forma, nada mejor que una taza de café y una buena conversación. ¿Por que motivo nació La Catarsis del ...
-
Quedan pocas horas antes de enfrentarme por primera vez ante el publico yo solo, y no estoy nervioso, no siento nada especialmente reseñable...
No hay comentarios:
Publicar un comentario