domingo, 7 de septiembre de 2014

Abriendo la temporada por todo lo alto.



Hoy he tenido el gran honor y responsabilidad de abrir la temporada de actiuaciones de un nuevo espacio escénico en la ciudad de Vigo. El Mimosa Café - Teatro, el nombre es mio, vamos, que se lo he puesto yo aunque no se si será ese u optro el que decida ponerle Luis, el sheriff del teatro, un tipo entrañable y muy profesional, que lo mismo te pinta un techo que te cuelga un telón, que te consigue unos leotardos de urgencia.



Hace menos de una semana todo esto que ahora podéis ver en estas fotos, no existía, pero cuando te encuentras en el camino con gente como Luis, Steve y otros muchos, la magia se hace realidad, sin trucos, simplemente con ganas cariño y saber hacer, cuando entré y comencé a bajar las escaleras de acceso a la sala, me vino a la memoria otra sala construida con mucho amor y respeto por esta profesión, La Sala Tribueñe, salvando las distancias claro.


Y finalmente se abrió el telón, los personajes fluyeron y flotaron por el escenario, se fundireon con el público y llegaron los aplausos, los bravos, esa subida de adrenalina y el ego henchido, y es que así, da gusto trabajar, cuando todo va como la seda porque alguien ha puesto todo de su parte, así que un millón de gracias a todas las personas que han hecho posible el éxito de la función de hoy, prometo volver!!!


jueves, 4 de septiembre de 2014

Lo importante es haberlo intentado, te levantas y sigues, es fácil

Teniamos pendiente el video del camino de este año.
Da igual si conseguí terminar el recorrido o no, lo que importa es que estuvimos en el camino, que caminamos hasta que no pudimos más, que actuamos a pesar del dolor, del desánimo y que los que pudieron estar en las plazas, lo disfrutaron, y eso, es suficiente.

No siempre sale todo a pedir de boca, pero el truco está, siempre, en continuar, seguir y llegado el caso, saber retirarse a tiempo para que el daño no sea mayor.

El camino está lleno de muchas cosas, buenas y malas, nunca os he ocultadolas malas, por que de ellas, tambien se aprende, y nos guste o no, mucho mas que de las buenas, de las que no se aprende, se disfruta.

Este año recorrí un pedazo de Aragón, conocí nuevos pueblos, paisajes diferentes y comí fruta en el margen del camino, escuché a la gente, ví como la población extranjera se mezcla con los lugareños, las trombas de agua de repente llenando una calle antes seca, de agua a raudales, nuevas puestas de sol y atravesé colinas, nuevos pueblos y sonrisas entre el público. Una vida de farandulero.

El rostro surcado por la preocupación, el dolor y el cansancio y unos ojos llenos de ilusión, pequeño Peter Pan, queriendo dar un paso más, al final, esos ojos parecian una calle de Longares tras el chaparrón, las lagrimas limpian y refrescan las mentes cuando ya no hay nada que hacer, llorar no es malo, lo malo es no tener con quien o, simplemente, no tener la capacidad de hacerlo.

Espero que esta serie de imagenes, os gusten, os veo en los caminos!!!


La memoria de los pies. Diario de un anormal. Presentación de la 6ª Edición

     Hace 10 años y 6 ediciones de una idea  Que cambió todo. Hace 10 años que decidí ser anormal. Así se lo hicimos saber al mundo con la a...